viernes, 13 de noviembre de 2009

Cumplimos 365 y ......." Vamos a hacer limpieza general", con Amalia Bautista


Vamos a hacer limpieza general
y vamos a tirar todas las cosas
que no nos sirven para nada, esas
cosas que ya no utilizamos, esas
otras que no hacen más que coger polvo,
las que evitamos encontrarnos porque
nos traen los recuerdos más amargos,
las que nos hacen daño, ocupan sitio
o no quisimos nunca tener cerca.
Vamos a hacer limpieza general
o, mejor todavía, una mudanza
que nos permita abandonar las cosas
sin tocarlas siquiera, sin mancharnos,
dejándolas donde han estado siempre;
vamos a irnos nosotros, vida mía,
para empezar a acumular de nuevo.
O vamos a prenderle fuego a todo
y a quedarnos en paz, con esa imagen
de las brasas del mundo ante los ojos
y con el corazón deshabitado.

Amalia Bautista (1962- )

Escucha este poema recitado por la propia autora:






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Con esta entrada, hoy - viernes y 13, 365 poemas, Ni Un Día Sin Poesía durante un año - , cerramos este proyecto que fue bonito mientras duró.
Nuestro sincero y cordial agradecimiento a todos aquellos que con sus visitas y comentarios han venido dando ánimo. Sin ellos, no hubiéramos llegado hasta aquí.
Queda este blog como testimonio de la importancia de la poesía, como refugio para muchos y, tal vez, como recurso multimedia para labores escolares de alumnos y profes (¡ojalá!... )
Que la vida os vaya bien
y que seáis felices.
Un abrazo.

jueves, 12 de noviembre de 2009

Talens, Jenaro. Epitafio.


Epitafio

" yesca me han hecho de invisible fuego"
Francisco de la Torre

Fui un viejo juglar, y conté historias.
Mi nombre os es indiferente.
Sólo dejo constancia de mi oficio
porque fue oficio quien dictó mis versos
no la pequeña vida que viví,
ni su dolor, ni su insignificancia.
Ella murió conmigo, y aquí yace,
desnuda como yo, bajo esta piedra.

Jenaro Talens (1946 - )


Escucha el poema recitado por el propio autor en
Fundación March

miércoles, 11 de noviembre de 2009

Sabines, Jaime. Algo sobre la muerte del Mayor Sabines.


Padre mío, señor mío, hermano mío,
amigo de mi alma, tierno y fuerte,
saca tu cuerpo viejo, viejo mío,
saca tu cuerpo de la muerte.

Saca tu corazón igual que un río,
tu frente limpia en que aprendí a quererte,
tu brazo como un árbol en el frío
saca todo tu cuerpo de la muerte.

Amo tus canas, tu mentón austero,
tu boca firme y tu mirada abierta,
tu pecho vasto y sólido y certero.

Estoy llamando, tirándote la puerta.
Parece que yo soy el que me muero:
¡padre mío, despierta!

(De "Algo sobre la muerte de Mayor Sabines", 1973)

Jaime Sabines (1926-1999)

(Escucha al propio Sabines recitando la Parte Final
de este largo poema en La Palabra Virtual)

martes, 10 de noviembre de 2009

Anónimo. El corregidor y la molinera (romance)

Joaquín Díaz, músico y folclorista
En la provincia de Huelva,
había un molinero honrado
que ganaba su sustento
con un molino arrendado
y era casado con una moza
que era una rosa
y era tan bella
que el corregidor, madre,
se prendó de ella.

La regalaba, la prometía
hasta que un día
le pidió los favores
que pretendía.

Responde la molinera:

-Vuestros favores admito,
pero siento si nos pilla,
mi marido en el garlito,
porque el maldito
tiene una llave,
con la cual cierra,
con la cual abre
cuando es su gusto,
expuesto es que nos pille
y nos dé un gran susto.

Responde el Corregidor:

- Me estoy haciendo una idea
de mandarle en el molino
algo que allí le entretenga.
Según lo digo, será de trigo
porción bastante.
Que lo muela esta noche
que es importante,
para una idea que tengo oculta
bajo la multa
de doce duros.
Así será del modo, estemos seguros.

Allí por aquel molino
ha pasado un pasajero
que entendía de moler
tan bien como el molinero:

- Si tienes ansia por irte a casa
vete tranquilo
que esta noche sin falta
se muele el trigo.

Ha salido el molinero
y a su casa ya se ha ido.
Les ha encontrado a los dos
como en harina metidos.

Vete tranquilo, buen molinero,
ve a tu molino
no dejes que el vecino
te muela el trigo.

(Anónimo)

Versión de Joaquín Díaz


Lee más romances aquí

lunes, 9 de noviembre de 2009

Hanna. Como la vida.

(Fotografía: Universal Music Spain)

Yo quería ver el cielo como yo lo vi al nacer:
azulito con esmero y sin basura y sin la mierda
del país que se está cargando el cielo
y me está jodiendo a mi (bis)

Voy queriendo renacer, inventando mis canciones.
Voy siguiendo tus pasitos, a ver si me dan lecciones
y no puedo, porque no quiero, porque en el fondo me da miedo
de esta vida que me viene y que no me la merezco.
No me la merezco
ahh…
(Estribillo)
Y empecé a ser fuerte. Cómo no, a ser valiente.
Y empecé a correr, sin pensar en el ayer.
Y empecé a ser fuerte, a llevarme la corriente,
y empecé a comprender que la vida son dos días
y que el miedo no te deja andar ni ver.
No, no te deja andar ni ver.
Buscaré la solución a mis problemas y con mi amor
no me quitaré el sombrero hasta que no te lo hayas quitado tu primero.
Y empezaré a ser fuerte y empezaré a crecer
y a sonreír a la vida que me viene.
No la dejare atrás. Eso no me conviene.
Me conviene ser fuerte y sobre todo no rebelde.
Que ya me la he quitado,
que ya me la he quitado la coraza del pasado.
Y empecé a ser fuerte, como no, a ser valiente.
Y empecé a correr sin pensar en el ayer .
Y empecé a ser fuerte, a llevarme la corriente.
Y empecé a comprender que la vida son dos días
y que el miedo no te deja andar ni ver,
y es que el miedo no te deja andar ni ver

Yo quería ver el cielo como yo lo vi al nacer…

Ana Isabel Iglesias Ferrer (Madrid, 1985-)
más conocida por su nombre artístico:
Hanna


Para Irene, en su décimo octavo cunpleaños.

domingo, 8 de noviembre de 2009

De Góngora, Luis. Ilustre y hermosísima María


Ilustre y hermosísima María,
mientras se dejan ver a cualquier hora
en tus mejillas la rosada Aurora,
Febo en tus ojos y en tu frente el día,

y mientras con gentil descortesía
mueve el viento la hebra voladora
que la Arabia en sus venas atesora
y el rico Tajo en sus arenas cría;

antes que, de la edad Febo eclipsado
y el claro día vuelto en noche obscura,
huya la Aurora del mortal nublado;

antes que lo que hoy es rubio tesoro
venza a la blanca nieve su blancura:
goza, goza el color, la luz, el oro.


Descarga la obra completa digitalizada de Góngora
enriquecida con archivos multimedia,

sábado, 7 de noviembre de 2009

Siles, Jaime. Variación barroca sobre un tema de Lucrecio


I

En una noche nos hacemos viejos
y, al despertar al mundo, la mañana
en la luz del cristal de la ventana
nos clava, como insultos, sus reflejos.

Los ojos en el agua son espejos
de la memoria llena de gris grana
y la palabra, para siempre cana,
nos deja sus acentos circunflejos.

En el lavabo de las horas lavo
el hollín de los días. Las semanas
dejan cal en el cuerpo; ladeada,
la sombra de los años; ignorada,
la inteligencia de las cosas vanas:
el grifo, el jabón, este lavabo.

II

El grifo, el jabón, este lavabo
adelantan la ciencia soberana
del existir: mirar por la ventana,
ver cuántas cosas cada día lavo.

Un resplandor de rayas, rojos lagos,
una copa, un libro, una mañana
de otro rostro mirando en la ventana
el mismo gris de sus contornos vagos

me hacen saber que acentos circunflejos,
auroras grises de los días, granas
sombras inmovilizan los espejos;
que somos el rumor de los reflejos
de las horas, los días, las semanas
y que una noche nos hacemos viejos.

Jaime Siles (1951 - )

Sobre su concepción poética

Entrevista a Siles en video

viernes, 6 de noviembre de 2009

Darío, Rubén. Letanías a nuestro señor don Quijote.

Rey de los hidalgos, señor de los tristes,
que de fuerza alientas y de ensueños vistes,
coronado de áureo yelmo de ilusión;
que nadie ha podido vencer todavía,
por la adarga al brazo, toda fantasía,
y lanza en ristre, toda corazón.

Noble peregrino de los peregrinos,
que santificaste todos los caminos
con el paso augusto de tu heroicidad,
contra las certezas, contra las conciencias,
y contra las leyes y contra las ciencias,
contra la mentira, contra la verdad...

Caballero errante de los caballeros,
barón de los varones, príncipe de fieros,
par entre los pares, maestro, ¡salud!
¡Salud, porque juzgo que hoy muy poca tienes,
entre los aplausos o entre los desdenes,
y entre las coronas y los parabienes
y las tonterías de la multitud!

¡Tú, para quien pocas fueron las victorias
antiguas y para quien clásicas glorias
serían apenas de ley y razón,
soportas elogios, memorias, discursos,
resistes certámenes, tarjetas, concursos,
y, teniendo a Orfeo, tienes a orfeón!

Escucha, divino Rolando del sueño,
a un enamorado de tu Clavileño,
y cuyo Pegaso relincha hacia ti;
escucha los versos de estas letanías,
hechas con las cosas de todos los días
y con otras que en lo misterioso vi.

¡Ruega por nosotros, hambrientos de vida,
con el alma a tientas, con la fe perdida,
llenos de congojas y faltos de sol;
por advenedizas almas de manga ancha,
que ridiculizan al ser de la Mancha,
el ser generoso y el ser español!

[...]

Rubén Darío (1867-1916)

Otra página interesante:
Dariana

Video documental "Rubén Darío y el Modernismo"
del Instituto cervantes.

jueves, 5 de noviembre de 2009

Alas Mínguez, Leopoldo. Poética.

POÉTICA

En los tiempos que corren, salvo si tengo miedo,
prefiero estar sin preguntarme nada.
No importa dónde quedan los días que han pasado
ni entender si es eterna la vida, breve o larga.
Lo único que pido son sentimientos claros
y ver la luz del sol cuando despierto.

Comprendo que se va estrechando el cerco
y que el azar me tiende inesperadas trampas.
Los sueños no me alteran porque sé que son vanos
y olvidar me libera de penosas jornadas.
En mañanas oscuras, pocas veces al año,
me cubro con la sábana y lloro por los muertos.

La condición y el tiempo, 1992

Leopoldo Alas Mínguez (La Rioja, 1962-2008)

Este poema está tomado del sitio
poéticas